Hoy es Luna Llena

Podcast.

Editorial

Hoy es luna llena, la luna llena del mes de septiembre.

El día 8 me dejó mi compañero más fiel.

Quien me despertaba todas las mañanas desde hace 8 años. 

Ha dejado un gran vacío en la casa y en mí. 

Me cuesta mucho llegar y no ser recibido con sus saltos de alegría.

Ver la serie o la película de la noche juntos. 

Nuestras conversaciones surrealistas, a las que él respondía con sus miradas de color caramelo. 

Sé que es ley de vida y que su salud ya no daba para más. 

Por eso doy gracias.

Por haber tenido la suerte de compartir tantos momentos juntos, amigo Pluto.

El que parece que no quiere irse es el verano, aunque las mañanas ya son frescas y por la noche ya te puedes tapar con una mantita.

Os comparto dos acontecimientos de este pasado verano.

La conferencia improvisada en la que participé en la prestigiosa galería Hauser & Wirth, en la isla del Rey en Menorca, en sustitución de un arquitecto de renombre que se encontró dispuesto.

Me pilló como jugador que ni está convocado.

Y sin tener tiempo de calentar en la banda, tuve que salir a jugar de delantero. 

Menos mal que lo de hablar en público se me da mejor que lo del balón. 

Nadar en el mar , o en aguas abiertas como le denomínan ahora, es lo que se me da bien. Y este año me he sentido en forma como nunca 

Y todo gracias a mis compañeros  del puerto de Sóller. 

Un grupo fantástico y motivado con los que he entrenado y he podido competir este verano en travesías de hasta 8000 metros. 

Toda una hazaña que recordaré toda la vida.

No por la distancia, sino por la caricia que me propinó en la cara una medusa en el trayecto y que me durará unos cuantos años.

Y como se acerca el invierno y las noches se hacen largas, os paso una selección de películas y series que he disfrutado en esta temporada estival. 

También os apunto unos cuantos podcasts de ficción para aquellos que, como yo, tienen que hacer grandes trayectos en coche. 

Con un buen podcast, los kilómetros se hacen más cortos.

Y quien da recibe, por lo que espero vuestras sugerencias para las noches de chimenea y sofá.

El día 21 de septiembre entramos en el equinoccio de otoño.

Los días y las noches se igualan esperando a que nos cambien la hora. 

Un problema del que los de la Unión Europea solo se acuerdan cuando hay que acortar la hora .

Nos tranquilizan con que el año que viene se pondrán de acuerdo para no tener que entrar de golpe en la penumbra del invierno. 

Personalmente, es algo que me afecta sobremanera.

Cuando realizamos la inútil tradición de cambiar las manillas del reloj, o meter las sillas, como me recuerda un amigo, para saber que hay que retrasar en lugar de adelantar, La única forma de aliviarlo es  pensar que ya queda un día menos para que se asiente la cordura y el reloj vuelva a su posición. 

Mientras tanto, solo os puedo desear que la luna llena os ilumine.