Hoy es Luna Llena

Un lugar para emocionarse. Bien vale un viaje.

Chillida Leku es un museo único. Fusión entre arte y naturaleza se produce de una manera natural que renace da la mano de los galeristas Hauser & Wirth

Llevaba muchos años intentando ir.

Solo llegar me encontré con algo inesperado.

La obra del arquitecto Luis Laplace, quien se ha encargado de la entrada, cafetería y dependencias de la entrada al museo.

Una obra de planos y líneas que encuadran el paisaje.

Nos adentramos en el jardín y quedamos impresionados por las esculturas que danzan en el prado, que van cambiando de escala a medida que te acercas y las rodeas.

Puro dialogo entre materia, lugar, vacío, luz y movimiento. 

En el bosque nos encontramos obras que son masas que reposan en el prado y que inician un dialogo a través de huecos con el lugar. Huecos donde se cuela el vacío, donde se cuela la luz.

Ligereza y peso, planos iluminados, profundidad. 

Huecos donde se cuela el vacío, donde se cuela la luz.

Planos iluminados, profundidad. 

Me pierdo por el bosque hasta adentrarme en el caserío.

La estructura desnuda es una escultura en si misma.

Descubro la obra de Eduardo Chidilla que me emociona al recorrer el espacio.

Disfruto con las telas colgadas y de las primeras obras que te acercan al arte griego.

Estructuras de hierro que levitan creando sombras que forman parte de la misma escultura.

Me retiro al bosque, saco los lápices he intento captar el «aroma» de una de las piezas que me han cautivado.

Una pieza que se rompe por una línea proyectada.

Una parte busca levitar mientras la otra se aferra al lugar.

Juego con mis sombras para despedirme de este espacio tan increíble, sabiendo que voy a volver. 

Para saber + de Chillida Leku.